El jueves 12 de septiembre en la provincia de Calcídica se produjo un “accidente” tóxico preanunciado. Un camión que había sido contratado por la empresa minera Oro Griego (filial de la multinacional El Dorado Gold) para transportar condensado de arsenopirita desde las minas de Stratoni y Olimpiada a la zona industrial de Tesalónica, se averió y paró en un área de servicio de la carretera nacional. A causa de un desplazamiento de carga una buena parte de ella se virtió en la carretera.
Este incidente tuvo lugar apenas unas horas después de la presentación de una denuncia del Observatorio de Actividades Mineras contra la empresa minera Oro Griego por transportar y almacenar minerales tóxicos y peligrosos sin cumplir las condiciones previstas.
Unos minutos después del “accidente”, por la misma carretera pasaba un coche con miembros de la Coordinadora de la Lucha Anti-minera de los Habitantes de Calcídica. Ellos reconocieron tanto el camión como el material toxico peligroso que se había vertido y estaba amontonado al lado de la carretera. Al rato llegó al escenario del “accidente” la Policía de Tráfico, unas personas del Municipio local y unos ejecutivos y obreros de la empresa Oro Griego. Los obreros recogieron el material tóxico de la carretera sin tomar ninguna medida de protección.
El condensado de arsenopirita es particularmente tóxico y peligroso para el medio ambiente, ya que contiene arsénico en un 8%, y es inflamable, ya que contiene azufre en un 40%. Según el Observatorio de Actividades Mineras, el camión que transportaba el condensado no llevaba ninguna de las señalizaciones que conciernen a las sustancias “muy peligrosas para el medio ambiente” y “tóxicas” como el arsenopirita, y en las cuales se ven el grado y el código de peligrosidad de dicho condensado tóxico. En el talón de expedición del camión no estaba escrita la cantidad del condensado transportado, mientras que faltaban todos los documentos relativos con las instrucciones para el conductor del vehículo, así como los que precisan el equipamiento que tiene que tener cada vehículo que transporta materiales tóxicos.
Para nosotros el tema principal no es el incumplimiento de las normativas y las condiciones previstas por parte de la empresa minera. Puede ser que a corto plazo la empresa cumpla con (algunas de) las normativas y las condiciones de extracción, almacenamiento y transporte de los minerales tóxicos. Esto no va a cambiar el hecho de que en Calcídica se pretende llevar a cabo un crimen contra el medio ambiente de la provincia y sus habitantes. Como ha sido demostrado de los estudios medioambientales y de la experiencia que se tiene de semejantes proyectos en varios países, la extracción de oro en sí va a tener unas consecuencias catastróficas para el ecosistema de una buena parte de la provincia y para el estado de salud de sus habitantes. No obstante, al Estado griego y al Capital local y trasnacional esto les importa un bledo. Para ellos este megaproyecto desastroso constituye un negocio lucrativo que tienen que llevar a cabo al precio que sea. Lo único que les puede retener y que puede anular sus planes es la resistencia de la lucha anti-minera por tierra y libertad, y la solidaridad con su causa en todo el planeta.
Fuente: http://antigoldgreece.wordpress.com.
Source: Verba Volant